Recuperamos esta fiesta por ser esencialmente de niños y por descubrir el niño grande que todas las personas mayores llevamos dentro.  

Esta fiesta es tremendamente popular y además tuvimos la suerte de encontrar un artista que nos ha preparado unas carrozas que son toda una obra de arte. Hoy esta fiesta de los Magos ha alcanzado una gran estima en todos los pueblos de la comarca que nos visitan todos los días.  

En estas fiestas además de repartir caramelos y juguetes a todos los niños de nuestro pueblo, tratamos de recuperar la magia que se necesita para seguir abordando los grandes problemas de la vida diaria.  

Celebramos algo así como el nacimiento de la utopía y la capacidad de sueño que colectivamente tenemos que tener para que algún día los grandes objetivos de la humanidad no sean una pura quimera para entretener la alienación de los pueblos.

Los Magos, normalmente son elegidos entre los aspirantes por voto popular y otras veces, como el último año, se escogen entre las personas que en distintos puntos de Andalucía están llevando a cabo luchas ejemplares. Este año el motivo ha sido contra la LOU invitando a un estudiante de los que estaban acampados en el ayuntamiento de Sevilla y contra el racismo, invitando para ello a dos inmigrantes de los que están luchando en Almería contra esta nueva esclavitud del siglo XXI.

Alguien puede pensar que politizamos esta fiesta. Nosotros pensamos que no hay ninguna actividad humana donde no haya política, ya sea para mantener o para subvertir el orden establecido y nosotros, por supuesto, hacemos una opción descarada a favor de la subversión que es lo mismo que a favor de los derechos humanos más elementales. 

En este año (2002) hemos tirado 1 Kg. de caramelos por habitante, varios cientos de balones y hemos repartido juguetes a todos los niños de la localidad para que al menos tengamos la seguridad de que nadie se queda sin este trozo de sueño aunque no tengan sus padres medios económicos.